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SEFAC Opina

SEFAC considera que los farmacéuticos comunitarios son los profesionales sanitarios más adecuados para resolver de forma ágil y eficiente las consultas sobre medicamentos de la población

  • La Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC) considera que programas como ‘ATENTO’, recientemente anunciado por la Comunidad de Madrid, no son ni la mejor opción ni la más eficiente para resolver las dudas sobre los medicamentos de los pacientes.

 

  • Los farmacéuticos comunitarios tienen un contacto cercano y directo con los pacientes, al contrario que los farmacéuticos de atención primaria, y permiten una atención integral (presencial y telemática) durante 24 horas los 365 días del año.

 

  • Los recursos económicos públicos deberían destinarse para resolver los problemas sanitarios de los ciudadanos y no para generar duplicidades ineficientes de funciones que ya realizan los farmacéuticos comunitarios.

 

  • SEFAC también considera lamentable que en la actualidad siga siendo imposible la comunicación directa entre los farmacéuticos comunitarios y el resto de los profesionales sanitarios de los centros de salud o de otros niveles asistenciales a través de la receta electrónica para poder solucionar todas aquellas incidencias que afecten a la salud de los pacientes.

 

14 de diciembre de 2021. El paciente precisa de apoyo profesional en el manejo de sus medicamentos. El envejecimiento de la población, el aumento de las patologías crónicas y la polimedicación obligan a un esfuerzo creciente por parte de los profesionales sanitarios. Los farmacéuticos comunitarios son los profesionales sanitarios expertos en medicamentos más adecuados para resolver las consultas y las dudas de los pacientes y la población general sobre los tratamientos farmacológicos.

Desde la Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC) se quiere hacer constar las siguientes consideraciones tras haber conocido la iniciativa ‘ATENTO’, puesta en marcha por la Comunidad de Madrid (CAM), a través de la Gerencia Asistencial de Atención Primaria, y que consiste en un programa de atención telefónica para que los farmacéuticos de atención primaria (FAP) atiendan las consultas sobre medicamentos que les hagan llegar los ciudadanos tras concertar cita con la Unidad de Atención al Usuario (zona administrativa) de los centros de salud.

En opinión de SEFAC, esta iniciativa, y otras similares, no son eficientes y suponen un gasto público innecesario, intentando duplicar la labor que llevan realizando desde hace años los más de 55.000 farmacéuticos comunitarios cada día con los más de dos millones de personas que acuden a las farmacias a recoger sus medicamentos, recibir consultas o resolver todo tipo de dudas, tanto sobre sus tratamientos ambulatorios como sobre otro tipo de cuestiones relacionadas con su salud. De hecho, los farmacéuticos comunitarios resuelven más de 180 millones de consultas anuales, y ofrecen un innegable servicio público que permite tanto una accesibilidad amplia por proximidad y horario como una longitudinalidad de la atención, como la pandemia ha puesto en evidencia.

Iniciativas como ‘ATENTO’, además de haberse llevado a cabo sin contar con los farmacéuticos comunitarios, no reúne las características asistenciales necesarias para atender este volumen de consultas, ni por la facilidad de acceso para el paciente (300 farmacéuticos comunitarios disponibles por cada farmacéutico de atención primaria, que atienden sin cita previa durante 24 horas 365 días al año), ni por la experiencia clínica basada en el conocimiento de las características del paciente y su entorno. Es más, generan unas expectativas inalcanzables del servicio como confusión en el paciente al complicar aún más el laberinto sanitario y en la práctica generar duplicidades ineficientes.

La figura del FAP puede ser necesaria para desarrollar modelos de coordinación entre niveles asistenciales, fomentar guías de uso racional del medicamento entre profesionales y promover programas de educación a la población que son las tareas asignadas por ley y que están todavía por desarrollar, no solo en la CAM sino también en la mayor parte del país.

Además, las farmacias comunitarias tienen definidas por ley una serie de funciones, que permiten cubrir las necesidades de la población en relación a las dudas que puedan existir sobre los tratamientos. Algunas de esas funciones, que deben ser prestadas por los farmacéuticos comunitarios que trabajan dichas farmacias, en esta materia son:

  • La garantía de la atención farmacéutica, en su zona farmacéutica, a los núcleos de población en los que no existan oficinas de farmacia.
  • La información y el seguimiento de los tratamientos farmacológicos a los pacientes.
  • La colaboración en el control del uso individualizado de los medicamentos, a fin de detectar las reacciones adversas que puedan producirse y notificarlas a los organismos responsables de la farmacovigilancia.
  • La colaboración en los programas que promuevan las Administraciones sanitarias sobre garantía de calidad de la asistencia farmacéutica y de la atención sanitaria en general, promoción y protección de la salud, prevención de la enfermedad y educación sanitaria.

Desde SEFAC siempre se ha abogado por la colaboración con las autoridades sanitarias y con el resto de los profesionales sanitarios, especialmente en el nivel asistencial de atención primaria y comunitaria. Por este motivo, considera además que la relación entre los farmacéuticos comunitarios y los médicos y otros profesionales sanitarios de los centros de salud y de otros niveles asistenciales debería ser directa en todo aquello que afecte a la prestación farmacéutica y la salud de los pacientes que utilizan medicamentos y visitan las farmacias reforzando así la asistencia clínica al paciente sin interferencias. Por tanto, debería impulsarse una decidida colaboración con el resto de los farmacéuticos, sean de atención primaria o de hospital, cuando fuera necesario.

En este sentido es lamentable e inexcusable que los recursos económicos públicos se destinen a iniciativas como esta que intentan duplicar ineficientemente la atención farmacéutica al paciente y, sin embargo, cuando en pleno siglo XXI todas las farmacias españolas están ya comunicadas en red y son interoperables con el sistema sanitario, se siga sin disponer de una vía de comunicación directa farmacéutico-médico, que permita resolver las incidencias que diariamente obligan al paciente a volver al centro de salud o a contactar con su médico. 

Por todo lo expuesto, SEFAC pide a la Comunidad de Madrid y al resto de Administraciones que lleven a cabo iniciativas parecidas, que retire esta iniciativa y otras similares en otras CCAA y se desarrollen otras inclusivas y colaborativas con la farmacia comunitaria que realmente mejoren la atención sanitaria a la población, especialmente en un entorno pandémico y de estrés del sistema sanitario como en el que nos encontramos.

Sobre SEFAC

Constituida en diciembre de 2000, la Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC) se presentó en sociedad en marzo de 2001 y es una asociación científica y profesional de ámbito nacional con más de 5.500 asociados y delegaciones en todas las comunidades autónomas que tiene como objetivo prioritario profundizar en la cartera de servicios asistenciales de la farmacia comunitaria y convertirse en interlocutor científico de referencia del farmacéutico comunitario con las distintas administraciones y con el resto de las profesiones sanitarias. Más información en www.sefac.org.

Para más información:

Mario Vaillo (691 763 892 o mvaillo@sefac.org) y Javier Pulido (692 42 80 40 o jpulido@sefac.org).